UN CORAZÓN SIN MEMORIA



Mucho se ha dicho, se dice y se dirá sobre el perdón.
Y mucho es lo que no se hace cuando tenemos que perdonar.
A veces logramos superar una prueba pero cuando el obstáculo es más grande se vuelve más difícil de sortear.
Así vemos a nuestro alrededor vidas semidestruidas por la falta de perdón.
Cuando no perdonamos el corazón se endurece y nuestra vida se seca.
Esto no solo pasa entre las personas que no tienen a Cristo como el Señor de sus vidas. También sucede entre las personas que sí lo reconocen como tal.
No hay mucho que ahondar para encontrar hermanos que no se hablan, que ni se miran, ni se saludan.
Se olvidan que ¡DIOS ESTÁ MIRANDO!
EL CONOCE NUESTRO CORAZÓN, A ÉL NO PODEMOS ENGAÑARLO!
Alguna vez leí que Dios quiere que tengamos un Corazón sin memoria.
Seguramente algunas cosas son imposibles de borrar, como es imposible que no se note la rotura en un cristal.
SI es posible dejar de lado el rencor y dar paso al amor.
El amor es acción, aunque nos cueste aceptarlo. Por lo tanto puedo borrar de mi corazón el odio, y llenarlo de amor, porque es mi decisión, puedo ser más grande que cualquier daño que me causaran.
El recuerdo podrá quedar, como quedan las cicatrices después de una lastimadura. Pero ya no duele, ya no hiere.
Si Dios me amo tanto como para perdonar todos mis pecados, y habitar en mí con su santo espíritu.¿QUIÉN SOY YO PARA NO PERDONAR A MI HERMANO?
"SEÑOR, DANOS UN CORAZÓN SIN MEMORIA, UN CORAZÓN QUE SOLO TENGA LUGAR PARA EL AMOR QUE PROVIENE DE TU SANTO ESPÍRITU."

Comentarios